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En 24 años pueden pasar muchas cosas: es tiempo suficiente para que un recién nacido se convierta en adulto, para que la tecnología avance a pasos agigantados o para que todo un orden mundial se vea sacudido por normas y circunstancias cambiantes. En el caso de John Danford, 24 años son más que suficientes para convertirse en un miembro respetado y valioso de la creciente familia Fratco. "Serían 34 años si no me hubiera ido y luego hubiera vuelto", señala Danford, refiriéndose a la década que pasó en otra empresa antes de que el antiguo Director General de Fratco, Steve Overmyer, le pidiera que volviera. "En cuanto al nombre técnico real de lo que hago", ríe Danford, "no estoy seguro de cómo lo especificarías, pero dirijo el despacho para las ventas internas aquí en el patio de la oficina".
Tal vez las variadas funciones de Danford a lo largo de su cuarto de siglo en Fratco sean la razón por la que no presta demasiada atención a los detalles de los títulos. Antes, Danford cargaba camiones para Fratco él mismo, y también trabajó en la oficina durante casi ocho años como auxiliar de expedición. "Nada es igual. Todo es siempre diferente en el día a día del trabajo con la gente", reflexiona Danford cuando se le pregunta qué le gusta de trabajar para Fratco. "Obtienes todo tipo -diferentes puntos de vista y perspectivas- de los empleados con los que trabajas".
Además de toda la variedad, Danford menciona la reciente y continua expansión de Fratco como una ventaja de trabajar en la empresa, con nuevas oportunidades de promoción para los empleados creadas a medida que Fratco sigue creciendo. Danford también aludió al generoso paquete de jubilación de Fratco como una importante ventaja que espera en el horizonte. Sin embargo, la jubilación no parece estar en el futuro inmediato de Danford, cuya mente está claramente centrada en el aquí y ahora de la industria de tubos de drenaje. Cuando se le preguntó por la reciente escasez de resina, Danford tuvo mucho que decir sobre cómo ha sacudido al sector, así como al mundo en general.
"La gente no piensa en el impacto que tiene el plástico en su vida cotidiana, en que está constantemente a su alrededor y en que se consume constantemente. Si nos fijamos en casi todas las industrias, en cualquier producto, desde la línea de fabricación hasta el envasado, se necesita plástico para fabricarlo".
Puede que Danford haya sido uno de los primeros del sector en enfrentarse a los retos de la fluctuación de los precios de la resina. Pero, como viejo profesional, no lamenta las circunstancias. En lugar de eso, Danford aprovecha al máximo la mano que le ha tocado.
"Por supuesto, el campo médico es la máxima prioridad para el poco suministro de resina que hay", explica, "pero seguimos adelante y seguimos fabricando productos de máxima calidad. Así es la vida".
Cuando se trata de la vida en general, Danford comparte la máxima prioridad de Fratco: la familia. Por suerte, los muchos años que John lleva en la empresa han hecho que sus compañeros de trabajo también se sientan como en familia.
"Todo el mundo con el que trato en la empresa se siente como en familia", dice Danford. "Los conductores y yo, todos trabajamos mano a mano para hacer las cosas".
Innumerables granjas del Medio Oeste, así como la propia Fratco, agradecen el trabajo que Danford dedica al drenaje. Es de esperar que siga en el negocio una o dos décadas más.
