Como se ve en el Tried & True Número de invierno de 2024
La dureza del oficio en climas invernales puede provocar a menudo un problema molesto: manos secas. Tanto si estás manipulando tuberías de desagüe como estrechando la mano a un cliente, mantener las manos sanas es la mejor manera de seguir el ritmo de cualquier trabajo.
Causas de la sequedad de las manos:
- Lavarse las manos con frecuencia hace que la piel pierda sus aceites naturales debido a la exposición constante al agua.
- El uso de diversos productos de limpieza y disolventes, junto con los materiales manipulados en la obra, pueden contener sustancias químicas abrasivas para la piel.
- Las tareas al aire libre, sobre todo durante los meses más fríos, exponen nuestras manos a duras condiciones como las bajas temperaturas y el viento.
- Por si fuera poco, el uso habitual de herramientas o equipos puede provocar desgaste y agravar la sequedad cutánea.
Riesgos de no tratar las manos secas:
- Dolor - Ahórrese dolores innecesarios tratando sus manos antes de que lleguen a un punto de no retorno en invierno.
- Infección - Una vez que la piel seca se abre, es muy difícil mantenerla limpia y libre de bacterias.
Combatir la sequedad de las manos:
Puede que pienses que la opción más varonil es dejar que tus manos se vuelvan ásperas y duras, pero hay una diferencia entre duras y secas. Es difícil trabajar cuando tus herramientas principales están demasiado rígidas para funcionar. Así que escúchanos:
- Empieza por elegir una crema hidratante de larga duración y aplícatela después de lavarte y antes de irte a dormir para retener la hidratación.
- Cuando trabaje con materiales duros o se enfrente a las inclemencias del tiempo, tenga siempre a mano un par de guantes resistentes para protegerse de las superficies rugosas y el frío.
- Olvídate de los jabones industriales agresivos y opta por los que contienen ingredientes naturales que limpian eficazmente sin privar a la piel de sus aceites esenciales.
- La hidratación no es sólo exterior; beber el agua adecuada mantiene la piel robusta desde el interior.
Si quieres ir un paso más allá, úntate las manos con una crema hidratante o vaselina y ponte guantes para dormir. Este régimen nocturno asegura que tus manos estén preparadas y listas para cualquier cosa que les depare el día siguiente, y ni siquiera tienes que molestarte en intentar trabajar con una crema hidratante viscosa por todas las manos.